Mercurio, el Dios mensajero, Historia y Atributos

Dentro de las deidades consideradas y adoradas por los humanos, encontramos a Mercurio dios del Olimpo, el cual era mensajero de los dioses. Si quieres saber todo acerca de este Dios, te invitamos a que leas este artículo y así obtengas un mejor conocimiento.

Mercurio

Mercurio pertenece a la mitología romana, y era un importante dios del comercio, hijo de Júpiter y de Maia Maiestas. Este es uno de los dioses romanos de mayor relevancia, aunque no formó parte del Panteón romano hasta el siglo III antes de Cristo, cuando se comenzaron a conciliar las doctrinas griegas y romanas para ser reconocido entonces como Mercurio, el Dios del comercio.

Cabe destacar que además de ser conocido como el Dios del comercio, esta importante figura también representaba un protector para los viajeros, comerciantes, pastores y todo aquel cuyo trabajo estuviese relacionado de una y otra forma con el comercio y el manejo de mercancías. Es tanto así que su nombre proviene del latín merx, que quiere decir mercancía.

Según estudios realizados, los humanos lo adoptaron del Dios griego Hermes, y desempeñaba el oficio de intérprete y mensajero de los dioses. En este orden de ideas, mercurio en la mayoría de las ocasiones lleva el atributo del caduceo, el cual es una especie de cetro alado en el que se encuentran enrolladas dos serpientes. Este símbolo hace alusión a una fábula, y es que Mercurio vio como dos serpientes luchaban y las separó tranquilamente con su caduceo; estas dejaron de luchar de inmediato, y se separaron.

Su caduceo, simboliza un eje que representa el punto de enfrentamiento de los contrarios; pues además de la línea vertical, están las dos serpientes entrelazadas de manera simétrica que significa tanto la oposición como el equilibrio. Otra característica es que siempre llevaba un sombrero con alas, y dos telares que hacen referencia a su marcha ligera. Por otra parte, también lleva el título de psicopompos, puesto que se encarga de llevar las almas de los difuntos hasta el Hades.

Origen

El origen de Mercurio Dios de los comerciales, tuvo lugar cuando fue concebido por el principal dios de la mitología romana, Júpiter, con una ninfa llamada Maia. El niño nació en el monte Cileno, y fueron las estaciones quienes lo criaron, y en Grecia se le conoce como Hermes. Como se mencionó anteriormente, era el mensajero de los dioses, y es común que se represente como un joven sin vestimenta, que solo llevaba alas y unas sandalias.

Esta figura se caracterizaba por poseer una gran agilidad y astucia, también era un poco traviesa pero tenía grandes responsabilidades a su cargo; entre ellas, dirigir a las almas al infierno y devolverlas al mundo cuando debían habitar otros cuerpos. Además de ser considerado el Dios de los comerciantes, se le asocia también con los ladrones, en virtud de que robó ciertos elementos, entre los que destacan los siguientes: el tridente de Neptuno, las flechas de Apolo y el sable de Marte.

Culto

Mercurio Dios de los comerciantes no fue considerado como tal en la religión romana primitiva, si no que más bien figuró como tal una vez que la mitología romana fue sintetizada con la mitología griega; esto se llevó a cabo a principios del siglo III antes de Cristo, durante la República romana. En sus inicios, poseía las mismas características del Dios hermes, que consistían en las siguientes: estaba vestido con talarias y el pétaso alados, además de su peculiar caduceo que consistía en una vara de heraldo, que poseía dos serpientes entrelazadas que habían sido un regalo de Apolo.

Mercurio dios

Aunado a ello, esta deidad estaba acompañada generalmente por un gallo o heraldo de nuevo día, o bien un cordero o cabra como representación de la fertilidad; de igual manera una tortuga, que simboliza un mito referente a una lira construida a partir de un caparazón por Mercurio. Ahora bien, tal y como lo hacía Hermes, Mercurio era Dios del comercio, principalmente del cereal, y el mensajero de los dioses.

También se era quien estaba a cargo de dirigir las almas de los fallecidos al más allá y de regreso; además, se le consideraba el dios de la abundancia y del éxito comercial. Cabe destacar que en una oportunidad, Ovidio se refirió a Mercurio aduciendo que este también era quien llevaba los sueños de Morfeo hacia los humanos mientras dormían, desde el valle Somnus.

Conviene señalar que en siglo 495 antes de Cristo, se construyó el Templo de Mercurio en el Circo Máximo, el cual era una pista de carreras así como también un importante centro de comercio; por ende, era el sitio más adecuado para adorar a Mercurio Dios del comercio y de los viajeros. De igual manera, estaba situado entre el centro Patricio del Palatino y el Plebeyo del Aventino, motivo por el cual se lograba hacer énfasis en su rol de mediador entre partes opuestas.

Por otra parte, este dios no había sido incorporado al Panteón romano como una deidad si no hasta mucho tiempo después; no obstante, en la ciudad de Roma había una fecha para rendir tributo a Mercurio dios del comercio, pues todos los 15 de mayo se realizaba una fiesta denominada la Mercuralia. En esta celebración, las personas que trabajaban como mercaderes o comerciales, realizaban una especie de ritual consistente en sumergir sus cabezas en la fuente sagrada de Mercurio, con la creencia de que así obtendrían la sabiduría necesaria para lograr la prosperidad en sus negocios.

Sincretismo

Es necesario hacer referencia a que Mercurio fue un personaje muy popular entre las naciones que fueron conquistadas por el imperio romano, lo cual se deba probablemente a que en el sincretismo romano de equiparó a Mercurio con otros dioses. Al respecto, se debe decir que en este tiempo, cuando se habían descripciones sobre los dioses de las tribus germánicas o celtas, los romanos no las consideraban como otras criaturas sino más bien como una manifestación de sus diose locales. Esto se llama Interpretatio romana, y es un rasgo de esta cultura.

Es así como Mercurio Dios del comercio se asocia con una serie de distintas deidades celtas o germánicas, dándose a conocer notoriamente por todo el territorio. Ejemplo de ello es su fuerte relación con el dios germánico Wodanaz, quien era considerado como el dios principal de los pueblos germánicos. Hubo un escritor que los consideró a ambos como uno solo.

Nombres de Mercurio dios del comercio

Esta deidad tuvo una serie de epítetos que hacían alusión a diferentes roles o sincretismos con otras figuras no romanas, y para los romanos su nombre propiamente era Mercurius. Dichos epítetos más destacados son los que se mencionan a continuación:

Mercurius Artaios

Dicho nombre consiste en una combinación entre el nombre de Mercurio y de quien se consideraba dios celta de la caza y de los osos llamado Artaios, que era adorado en Francia.

Mercurius Arvernus

Este nombre es el derivado del Arverno celta fusionado con Mercurio. Respecto a este Dios celta, hay que acotar que era una deidad particular de la tribu Arverna, en Renania, donde era alabado por los humanos.

Mercurius Esibraeus

Consiste en una combinación entre la deidad íbera llamada Esibraeus con Mercurio. Con respecto a ella, solamente existe un inscripción que fue hallada en Portugal, específicamente en Medelin, y que posiblemente sea la misma figura que Blanda Isibraiegus, a la que se le realiza una invocación en una inscripción cerca de la villa de Bemposta.

Mercurius Cissonius

Este epíteto se deriva de la combinación entre el nombre del mercurio y el Dios celta Cissonius, quien de encuentra circunscrito a esta región desde Alemania hasta Francia.

Mercurius Moccus

El dios Moccus proveniente de la mitología celta, era comparado con Mercurio según las evidencias halladas en Francia, específicamente en Langres. Cabe destacar que este nombre guardaba relación con la caza de jabalíes, pues el nombre Moccus se vincula con la palabra cerdo.

Mercurios Gebrinius

Este epíteto se deriva de una combinación entre el nombre de Mercurio y el Dios celta o germánico llamado Gebrinius, cuya inscripción se halla en un altar localizado en Bonn, Alemania.

Mercurius Visucius

Consiste en una combinación del nombre del dios romano Mercurio y el dios celta Visucius, la misma se encuentra en una inscripción hallada en Alemania, específicamente en Stuttgart. Al respecto cabe destacar que Visucius era una deidad que se vincula con Mercurio, aunque también con el dios romano Marte, esto en virtud de una dedicatoria inscrita en Galia a Mars Visucius y Visucia, quién es su equivalente femenina. Ahora bien, este dios fue adorado en una región fronteriza entre Alemania y el imperio de Galia, principalmente.