Las leyendas de Querétaro ¡Una historia de suspenso!

La ciudad de Querétaro, esconde muchas historias entre sus calles, como uno de los estados de México; el cual es bastante conocido por sus hermosos pueblos  y  gente maravillosa. Sin embargo, no se escapa de tener historias o mitos de terror en cada rinconcito de este lugar. En este articulo, conocerá las leyendas de Querétaro, más famosas y a su vez escalofriantes.

Leyendas de Querétaro

En las siguientes líneas, ampliaremos los conocimientos sobre algunas de las historias más famosas y leyendas de Querétaro; las cuales han sido parte de una historia cultural de este hermoso estado de México. Así mismo; se ha vuelto famosa y reconocido por sus pueblos tan mágicos, y gente tan acogedora. Es que todos los habitantes de esta nación hablan de un sinfín de leyendas.

Si nombramos la leyenda de Querétaro, es hacer una lista bastante larga, de todas las historias que se han presentado en este lugar, así como han marcado un pasado y un presente después de ellas. Hay variedad de historias, las cuales se van transmitiendo de generación a generación y se mantienen vivas por el paso de los años. Toda persona conocedora de esta región, conoce que sus calles están llenas de secretos y sucesos escondidos, con los cuales ha llamado la atención de muchos turistas.

Leyendas Queretanas Cortas

Como se ha mencionada, hay variedad de historias y leyendas en Querétaro. Es por ello que comenzaremos por las más breves, y aunque son cortas; sus historias han marcado una relevancia en las personas que habitan en esta región. Las personas que allí viven; aseguran que por las noches se pueden escuchar voces de los espíritus que habitan las calles de Querétaro.

Una de las leyendas cortas más conocidas y extendidas por el país, es la que habla de la Carambada, así como también la leyenda de Son Bartolo o la de la Sombra de Maximiliano, entre muchas otras. A continuación algunos de las históricas más conocidas e importantes para los queretanos.

Leyenda  del árbol de la cruz

Según la historia indican que existe un  convento de la Santa Cruz; este ha sufrido varias modificaciones a lo largo del tiempo, sin embargo en sus adentros hay un árbol da pie a una de las leyendas de Querétaro más famosas, porque es un  árbol de espina en forma de cruz.

Según esa historia, esa peculiar planta pertenece a la familia de árboles de las mimosas; y es la única en el mundo que en vez de dar flores o algún fruto, genera espinas, que asemejan de una manera casi perfecta una cruz.

Fue en junio de 1697; cuando uno de los primeros franciscanos que impartió su religión y evangelizaba a los indígenas de Mesoamérica; el sacerdote  Fray Antonio Márgil de Jesús. Cuando llegó al lugar, traía un bastón consigo que lo ayudaban apoyarse en las caminatas largas; un día decidió plantar el bastón en los prados, que hoy en día es un hermoso jardín.

Este padre; Márgil de Jesús cristianizó durante 14 años en Costa Rica, Honduras, El Salvador y Nicaragua , así como la selva Lacandona (Chiapas); partes donde se suponía que pudiera haber surgido una planta similar, a pesar de que es adecuada de tierras áridas.Pero en ninguna de ellas se dio tan hermoso y extraño árbol; pues el se niega a salir en otro sitio que no sea el jardín del Templo de la hermosa Ciudad de Querétaro.

La Carambada

De acuerdo a la leyenda popular, la Carambada era el seudónimo que tenía una mujer; que su verdadero nombre era Leonarda Martínez. Nacida en un pueblo llamada La Punta. Sus padres murieron cuando aún estaba muy joven, y por ser la mayor, se hizo responsable de la crianza de sus hermanas más pequeñas. Este motivo la llevó a unirse a bandas criminales, para poder sacar adelante a sus hermanas y darles alimento. Muchas personas aseguran; que esta dama no era muy buena influencia, ya que desde muy pequeña se la pasaba con bandidos y malhechores.

Por ello, la Carambada; se dio a conocer por los ciudadanos de la localidad, ya que siempre estaba merodeando, para esperar el momento indicado y arrebatar de sus pertenencias a las personas más pudientes, que transitaban en las calles a horas de la noche, sobre todo a quien estuviera solo, o en calles oscuras.

Por la reseña que se recibe de ella; se dice que Leonarda era una mujer de baja estatura, de piel morena; y que presentaba una cicatriz que resultaba fácil reconocerla. En su mejilla izquierda esta dicha cicatriz, y era bastante grande y visible. Esta mujer sabía muy bien hacer su trabajo y mezclarse con la gente dependiendo en que sitio o con que clase de personas iba a tratar. Ejemplo; si intentaba robar joyas a gran valor a las mujeres de alta jerarquía mexicana; esta se vestía con trajes de seda y hablaba muy educada y delicadamente.

Esto con intención de ganarse la confianza de los que estaban a su alrededor y poder mezclarse entre su clase; esperando el momento justo, para quitarle sus pertenencias. Era muy hábil con sus manos; y sin darse cuenta despojaba de sus joyas a las señoras; que ni cuenta se daban que había sido ella, por lo rápida que era.

Aunque hay una historia; que la mezcla con amoríos entre ella y un militar imperialista. El mismo fue puesto prisionero por algunos delitos inculpados. Esta fue a suplicar por su libertad a Don Benito Juárez; quien era el presidente de la república. Pero le fue negado, ese día ella juro vengarse por no cumplir su petición y por haberla echado.

Entre tantas cosas y agilidad que tiene la Carambada; entre sus habilidades estaba el manejo de armas, el machete y el cabalgar en caballo. Aunque; existe una referencia, de que Leonarda, había tratado como una hierbatera, y esta le había enseñado a maneja la veintiunilla; la cual era mata; que tenía el efecto de acabar con la vida de quien la consumiera en 21 días después de tomarla.

A pesar de no haber sido confirmado aún; se dice que la carambada, asesino con esa plata a Don Benito Zenea y a Donde Benito Juárez. Ya que ella mantuvo una conversación a solas con los dos en ocasiones distintas; y justamente después de los veintiún días de esa conversa, los dos sujetos fueron hallados muertos; aunque el resultado de autopsia fue un paro cardíaco; muchos aseguran que Leonarda quien los asesinó y cumplió su venganza.

Esa y muchas razones tenían los policiales para detener a Leonardo; entonces fue Vicente Otero; el que se dispuso a darle fin a sus delitos; un día la encontraron mientras estaba en un robo a la luz del día. Esta al verse rodeada; comienzo a dispararles a los policías y Otero también abrió fuego contra ella. Generándole graves heridas por cinco balazos que recibió; por ello no tuvo más opción que rendirse.

Fue trasladada a un hospital; pero esta sabía que no resistiría por lo que pidió un sacerdote para confesarse. Murió a los dos días siguientes, y nuca se supo todo lo que le confesó a aquel padre. Su historia es bastante conocida por los habitantes de la zona, por lo polémica y ajetreada que fue la vida de Leonarda Martínez, alias la Carambada. La cual forma parte de las leyendas de Querétaro.

Leyenda de La Casa de Don Bartolo

Se trata de una afamada leyenda de Querétaro que hace reseña a una edificación, conocida como “La Casa de Don Bartolo”. El renombre de esta zona se debe a un hecho aterrador que ocurrió en lo íntimo de la casa. La tradición cuenta que, a mediados del siglo XVII, Don Bartolo, un individuo rico y creyente, vivía con su hermana, con quien según los rumores, sostenía relaciones amorosas y llenas de pecados.

Cada año; cuando cumplía años, disfrutaban de una rutina de organizar una fiesta en la que no podía faltar un brindis, que, por varios años, se hacía el mismo, con el mismo motivo y la misma frase:

“Brindo por la señora, mi hermana, por mi ánima y por el 20 de mayo de 1701”.

El día del 20 de mayo de 1701; justamente cuando el reloj apuntó las doce de la noche; se escuchó un disparo proveniente de la casa de Don Bartolo; y un silencio inaudito invadió todo el pueblo. En la mañana siguiente, los vecinos se percataron que de la casa no salía nadie; ni Bartolo, ni su hermana; por lo que les llamó mucha la atención, y decidieron comunicarse con el alcalde para que este abriera la puerta. Pero cuando lograron entrar se encontraron con una escena terrible.

Se encontraron con la hermana del señor Bartolo; tirada en el suelo, en un pozo de sangre, sin vida. Ella tenía una expresión muy extraña en su cara; como de angustia, miedo y terror. Por otro lado; el cuerpo de Don Bartolo, estaba colgado al techo; quemado y ahorcado, la mandíbula completamente abierta y fuera de sitio; y su cara reflejaba mucho miedo y temor.

Quienes presenciaron esta escena quedaron traumados, llamaron al padre del pueblo, y la policía, revisaba cada rincón de la casa; tratando de hallar algún indicio que diera con el criminal. Lo único que lograron conseguir en una de las gavetas; fue un contrato, aparentemente con el diablo; a quien Bartolo había vendido su alma. Este le otorgaría propiedades, riquezas, buena vida; logradas de negocios sucios; y le pagaría con su alma; este contrato duraba medio siglo y fue vencimiento era el 20 de mayo de 1701.

El sacerdote, hizo el exorcismo correspondiente para que el diablo dejará el alma de Don Bartolo. Sin embargo; por muchos años la casa se mantuvo abandonada, y hay quienes aseguran que por las noches, se oían llantos de sufrimientos y arrepentimientos que venían de la casa y el espíritu de Don Bartolo, suplicando que lo dejara descansar en paz.

Leyenda de Chucho el Roto

Esta historia es una de las leyendas de Querétaro; bastante conocida y el Chucho el Roto; es un personaje muy reconocido para la cultura histórica del folklore mexicano. Incluso muchas personas tienden a compararlo con “Robin Hood”, ya que este robaba a las personas más pudientes para ayudar a los que padecían o no tenían nada y eran considerados pobres para esa temporada.

Entre las cosas que se pueden decir de este icónico personaje, es su nombre real era Jesús Arriaga; y fue un delincuente para finales del siglo XIX. Sin embargo; quienes compartieron con el aseguraban que era un hombre muy divertido, y  bondadoso al que todo el pueblo quería. Tanto así, que era capaz de hacer que sus víctimas llegarán a quererlo y luego los robaba y estos jamás desconfiaban de él.

De este hombre, hay mucha historia, he incluso se han hecho adaptaciones en teatro y cine contando su vida. Y un dato un poco curioso de su trayectoria, es que por más robos y delitos que cometió, junto con su banda. Estos jamás usaban la violencia no agredían a sus víctimas, eran capaces de despojar a las personas de sus propiedades pero no le ocasionan daños físicos alguno.

La sombra de Maximiliano 

Existen leyendas queretanas que están establecidas en hechos reales e históricos, una de ellas está ligada con Maximiliano de Habsburgo, quien fue crucificado en el Cerro de las Campanas. Mientras esperaba para ser fusilado, el que en aquel tiempo era el emperador de México, fue llevado al monasterio de la Santa Cruz, en donde cada día de su recinto se asomaba por la ventana y pasaba gran parte del día solo viendo donde estaba el camposanto.

Ese lugar actualmente es el cementerio para muchos de los personajes más conocidos del estado, pero para esa época era un cementerio común, donde llevaban a los más pobres o quien no tenía familia que los reclamaba. En ese mismo lugar había un señor que trabajaba sin cesar, y jamás dejaba un trabajo incompleto, su nombre era Simón.

Un día de su trabajo habitual, Simón escuchó una voz que venía de lejos, y que lo llamaba directamente a él; diciéndole: ¡Simón… Estoy aquí, ven por favor! Aunque sintió algo de temor, él siguió en sus labores diarios, y prefirió no hacerle mucho caso. Pero los gritos se hacían más y más fuertes. Y a este le dio algo de curiosidad y quería saber de dónde venía esa voz o si era alguien que le estaba haciendo una broma.

Sin pensarlo más, decidió ir hasta el sitio donde venían los gritos, había un faro de luz; y al asomarse vio una sombra muy grande. Y este atemorizado grito fuertemente: ¡No puede ser, es el emperador Maximiliano en persona! Este había visto la silueta completa de ese emperador asesinado. Al día siguiente, este renunció a su trabajo y más nunca se supo de Simón. Hay quienes indican que escuchan y ven la sombra del emperador Maximiliano en ese cementerio, por ello es una de las leyendas de Querétaro.

Leyendas de Querétaro de terror

En este fragmento de nuestro artículo vamos a estar al tanto de algunas de las más famosas leyendas de Querétaro de terror, esas memorias que no sólo enaltecen el vocabulario o al conocimiento general, sino que además logran penetrar en el espíritu de los lectores. Se presentan los relatos populares que, contados por testigos, sucedieron en la vida real, haciendo que sean leyendas terroríficas y dejen huellas.

Una leyenda de Querétaro de terror famosa es la de la llorona, además de otras tradiciones como la del agujero del diablo y la casa de la Zacatecana de las cuales ampliaremos más detalles a continuación:

La llorona leyenda de Querétaro

La superstición de la llorona es una de las leyendas de terror más famosas, no sólo de México sino de gran parte de América Latina. Aunque cada país tiene su adecuada versión de la llorona, pero en esta ocasión vamos a departir un poco sobre la llorona de Querétaro, acreditada por tratarse de una señora que no perdió a sus hijos, sino que a estos los mató su propio padre.

Hay muchas versiones que hablan sobre el motivo por el que el padre mató a sus hijos; unos dicen que fue por una infidelidad de la mama; con un vecino cercano; y el esposo al darse cuenta, despertó su parte demoníaca e hizo una tragedia con los niños. Cuando este supo que su esposa lo engañaba, quiso vengarse, y este sospechaba que los niños no eran hijos de él, sino de su amante, por eso se ensaño con los pequeños.

Un día, cuando los niños estaban durmiendo, este entro al cuarto, los observó por un rato y luego decidió ahorcarlos sin ninguna piedad. Cuando la mama, llego y entro a la habitación, ya era muy tarde, los pequeños estaban sin vida acostados en el piso. Nunca más se supo del esposo; pero ella desde ese día perdió la cordura. Salió a la calle, despeinada, con una bata blanca y un camisón encima, como venía vestida para dormir.

Se mantenía en la calle hablando cosas sin ningún sentido, y solo preguntaba por sus hijos, hasta que murió busco la razón de sus hijos. Después de su fallecimiento, esta aparecía por las calles de la ciudad, vestida de la misma forma y gritando y llorando en busca de sus hijos: ¿¡Donde están mis hijos!? Era lo única que decía, aterrorizando a los habitantes.

El agujero del Diablo

La ficción narra que hace varios años, en lo que para ese tiempo era el Templo de San Francisco, unos cuantos muchachos se arreglaban para cristianizarse sacerdotes. Un día, cuando uno de los seminaristas se mantenía orando, oyó un ruido y al levantar la cabeza estaba a la mira una seductora y bella mujer quien le estaba sonriendo. El joven se alzó ágilmente de su sillón y fue en recorrido hacia el departamento del párroco para contarle lo ocurrido.

El párroco le indicó que lo que había visto era nada más y nada menos que una tentativa del demonio para apartarlo de su verdadera vocación. Por lo que le expuso que lo mejor sería que a partir de ese instante, formará la oración aislado en su habitación. Este le hizo caso a la orden y el perfil de aquella mujer no surgió por un largo tiempo.

No obstante; una noche los chillidos del discípulo avivaron al resto de sus compañeros. Los quejidos pidiendo ayuda eran tan fuertes que inclusive varios de ellos pretendían demoler la puerta sin éxito. Mientras, en lo íntimo del cuarto estaba el chico y la presumida mujer, pero esta vez está investido del mismo diablo. En su mano derecha, el joven tomó la Biblia y en la otra un rosario de madera.

Fueron tantas las oraciones y súplicas del joven y sus compañeros, que el demonio no tuvo otra opción que ir retrocediendo, este decidió salir por el lugar que fuera. Cuando logró irse, la puerta se abrió de una manera bastante ruidosa y de un solo golpe. Cuando se dieron cuenta en el techo se había hecho un gran agujero muy grande, por donde había salido esta deidad. Por lo que lo llamaron el agujero del Diablo, de las leyendas de Querétaro.

La casa de la Zacatecana

Según las historias, y las leyendas de Querétaro; cuentan que la casa de la Zacatecana; es una vivienda marcada con el número seis y que está ubicada en la calle de Flor Alta. Hace aproximadamente unos cincuenta años, Zacatecana y sus pareja compraron la casa y lo modelaron a su gusto. En ella eran muy felices y siempre se les veían juntos dando paseos agarrados de la mano.

Toda esa felicidad se desvaneció, cuando el esposo decidió ir a su pueblo natal; a revisar unas cosas de negocios y ver cómo estaban las propiedades; pero nunca más volvió a Querétaro. A raíz de ese hecho, se dieron muchas suposiciones, entre ellas que la misma Zacatecana, lo había mandado a matar para ella quedarse con todo la herencia y sus propiedades y que además estaba de amoríos con el capataz.

Se dice que ella mandó a matar a sus esposo, y que luego ella misma mató a sus asesino para no dejar testigos. Los enterró a ambos en las caballerizas de la casa. Al parecer alguien sintió deseos de venganza ya que ella se quedó con todas las riquezas de su esposo y vivía en esa casa con lujos y riquezas. Por lo que un día amaneció muerta en la plaza de ciudad a la luz pública de todos los habitantes, se dice que el o los asesinos ingresaron a la casa por el balcón de la casa, la mataron y luego la llevaron a la plaza.

Hoy en dia esa casa fue convertida en un museo, donde muestran cada una de las reliquias que dejó; sin embargo,  se dice que su alma habita en esa casa aun.

Leyendas de Querétaro para niños

Este este apartado, compartimos algunos de las leyendas de Querétaro, que se le pueden intuir a los niños, que son bastante famosas y conocida por muchos. Aunque estas también están mezcladas entre el miedo y espantos, son más ligeras, sin embargo; queda en responsabilidad de los representantes que los niños conozcan estas historias. A continuación, más información sobre algunas de las leyendas más importantes queretanas:

La casa del Faldón

La casa del Faldón fue edificada en el siglo XVIII y forma parte de una de las leyendas de Querétaro más afamadas de la región mexicana. Todo se emprendió cuando dos personas concernientes con el gobierno de la localidad obtuvieron un desacuerdo. Por un lado existía un alcalde de principio indígena, mientras que por el otro estaba un concejal originario del “Viejo Continente”:

Por los relatos de muchos; durante una manifestación religiosa, los dos personajes gozaron un choque dado a que eran los garantes de administrar mencionado evento. Durante el camino de la procesión, Don Fadrique (el nombre del concejal) tiró el faldón de la casa de Don Pablo (el Alcalde) haciendo entonces que éste se despegara por completo.

Don Pablo se quejó de una vez con las autoridades y estableció a la Junta Real que se le suministrará una sanción ejemplar al asistente público. Las autoridades exigieron a Don Fadrique a cambiar de ciudad, por lo que obtendría la construcción una nueva residencia en lo que se conocía como “La otra banda”. Una vez acabada, los campesinos la comenzaron a llamar como “La casa del Faldón”.

Hoy en día, todavía existe esa casa, pero ahora es un centro cultural. En ese mismo lugar hay una torre, donde tenían toda la vista de y podía observar lo que se hacían en el otro lado con el partido contrario.

El sereno sin cabeza

La leyenda emprendió a mediados del siglo XIX, entre el portal de Valderrama y el puente Colorado, donde estaba ubicada la ondulante calle de Silva, hoy Pasteur entre avenida Universidad y 15 de mayo. Por lo estrecho del puente, sólo se admitía el paso de personas impidiendo que circularan por él;  animales con o sin jinete.

Obscuro y afligido, el portal de Valderrama culpaba desde entonces el paso de sus mejores años, que sin duda existieron en los de la segunda mitad del siglo XVI en la que la mansión; que entre la historia, fue una de las primeras  citadas “Casas Reales”, es decir, la edificación que alojaba a las autoridades comunales establecidas desde 1578 con la Alcaldía Mayor de Queretaro.

En este territorio nació una de las leyendas más conmovedoras que se han escrito en Querétaro: “El sereno sin cabeza”, mito que nos manifestó el Licenciado Guadalupe Ramírez Álvarez, primer historiador oficial del estado. De los desafíos de una banda del río; contra la otra, este fue testigo mudo el Portal de Valderramos, invocación así por llevar su originario dueño tal apellido.

Según los hechos contados por este cronista; en el Puente Colorado; este era un puente internacional; se encontraba en la frontera del barrio de San Sebastián, donde los veteranos vecinos, acreditados como los encuerados, desde la banda norte del Río Servín; al cobijo de las arboledas y de las tapias de las huertas, imposibilitaba a los de la banda sur la entrada a su barrio. Cuando los encuerados se pasaban a los barrios de la ciudad, incitaban, en ellos, luchas muy fuertes.

El consejo para evitar tan brutales enfrentamientos resolvió alumbrar más el lugar y designar a un sereno representante de la serenidad y del encendido de los faroles. Las disputas cesaron por algunos días, quizás semanas, pero una noche se dispuso una extraordinaria cruzada.

El solitario guardián, haciendo recepción de una insólita valentía alterno en poner orden, pero un precipitado encuerado lo irrumpió con un machete, con tal rabia que lo decapitó ahí mismo, a mitad del puente. Ante tal hecho los rijosos se aislaron despavoridos a sus escondites.

Aunque nunca se pudo conocer quién fue el asesino. Esto hizo que por un largo tiempo las peleas cesaron. Pero una noche, se volvieron a cruzar las bandas en el Puente Colorado; se estaban enfrentando como nunca antes. Y en el momento menos pensado, apareció el cuerpo del sereno sin cabeza, con un faro de luz encendido en una de sus manos y con la otra llevaba un palo fuerte. Esto espanto a los presentes, y según nunca mes se enfrentaron.

El marqués

Esta leyenda es una tradición de amor. Se dice, que hace mucho tiempo en la ciudad de Querétaro; carecían de agua potable. Y  como se conocía la bondad del Marqués de la Villa del Villar del Águila; donde existía el convento de las monjas capuchinas. Estas le pidieron ayuda, y así conocer su noble corazón de antemano. Este individuo estaba absolutamente enamorado de una de ellas.

Sor Marcela; este accedió ayudarlas, pero les puso una condición, que esta hermana aceptara ser su esposa,  distinguiendo los beneficios que tendría la ciudad, Sor Marcela asintió pero le dijo que tenía la condición, de que solo se casarían por convenio sin hacer vida de casados como tal. El Marqués aceptó satisfecho, asumiendo que con el tiempo la iba a inclinar a amarlo como él la quería a ella. Entonces se llevó a cabo el matrimonio y este fundo el monumento de agua que hoy simboliza a Querétaro.

Esta es una de las historias más importantes entre la evolución de este pueblo; ya que habla de la historia de amor entre un marqués y una monja; que ante los ojos de muchos es un pecado, para este pueblo fue el nacimiento de un nuevo renacer con el agua  y el amor; entre Sor Marcela y el Marqués de la Villa.

Conin

Si hablamos de mitos importantes e auténticas se debe hacer memoria a la vida de Conin o Fernando de Tapia, un nativo otomí que está calificado como el fundador del espacio que más tarde se bautizaría en la ciudad de Santiago de Querétaro, México. Fue un indígena otomí pochteca; que comercializaba con los mexicas y las tribus chichimecas vendiendo hilo de maguey; para cambiarlos por pieles de animales, arcos y flechas.

El mito dice que nació en Nopola, reino de Xilotepec, fue persuadido por el esclavista de Hernán Pérez de Bocanegra para volverse cristiano. De esta forma, fue bautizado por Juan Sánchez de Alanís con el nombre cristiano de Fernando de Tapia. Auxilió a la rendición y transformación al catolicismo de los indígenas de Andamaxei. Por esta razón se dio a conocer bastante y fue querido por muchos habitantes del lugar.

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